Una madre acusada de decapitar a su bebé de 3 semanas y media de nacido gritaba: "No quise hacerlo, él me lo ordenó", mientras su hermana solicitaba una ambulancia en una llamada desesperada de cuatro minutos a los servicios de emergencia, divulgada el miércoles.
Otty Sánchez, quien habría dicho a la policía que fue el diablo quien le ordenó matar y mutilar a su único niño, grita también en la grabación, "lo amo", y dice que se dio una cuchillada en el pecho y otra en el vientre mientras su hermana Priscilla trata de consolar a la madre de 33 años.
Después de que la persona que atendió la llamada le dice a García que una ambulancia está en camino, la hermana grita tres veces: "¡Dios mío!"
Sánchez está acusada de asesinato premeditado por la muerte de Scott Wesley Buccholz Sánchez, a quien las autoridades hallaron decapitado y mutilado en una alcoba de la casa de la hermana, el domingo por la madrugada.
La policía dijo que Sánchez arrancó a mordidas tres dedos de los pies del infante y se comió parte del cerebro.
García dice a su interlocutor en el teléfono que su hermana ha apuñalado al niño y que hay sangre por toda la cama.
"Enloqueció la noche anterior. Escuchaba voces", relata García. "Me trajo una y otra vez al bebé. Finalmente se calmó y yo le llevé otra vez al bebé. Y ahora los gritos me despertaron".
Otty Sánchez, quien habría dicho a la policía que fue el diablo quien le ordenó matar y mutilar a su único niño, grita también en la grabación, "lo amo", y dice que se dio una cuchillada en el pecho y otra en el vientre mientras su hermana Priscilla trata de consolar a la madre de 33 años.
Después de que la persona que atendió la llamada le dice a García que una ambulancia está en camino, la hermana grita tres veces: "¡Dios mío!"
Sánchez está acusada de asesinato premeditado por la muerte de Scott Wesley Buccholz Sánchez, a quien las autoridades hallaron decapitado y mutilado en una alcoba de la casa de la hermana, el domingo por la madrugada.
La policía dijo que Sánchez arrancó a mordidas tres dedos de los pies del infante y se comió parte del cerebro.
García dice a su interlocutor en el teléfono que su hermana ha apuñalado al niño y que hay sangre por toda la cama.
"Enloqueció la noche anterior. Escuchaba voces", relata García. "Me trajo una y otra vez al bebé. Finalmente se calmó y yo le llevé otra vez al bebé. Y ahora los gritos me despertaron".
"El bebé está muerto, está muerto. Por favor, que venga alguien".
Sánchez permanece detenida y se le ha fijado una fianza de un millón de dólares. Se desconocía el miércoles si contaba con un abogado.
Scott W. Buchholz, padre del menor, dijo que Sánchez sufrió depresión postparto y le confesó que era esquizofrénica una semana antes del asesinato. Buchholz, quien también dijo ser esquizofrénico, señaló que quiere que la mujer sea ejecutada.
Vía: chron