John Matthews notó por primera vez dos puntos que oscurecían la visión en el ojo izquierdo en diciembre y se sometió a una serie de pruebas antes de enterarse de la existencia del desagradable inquilino.
Matthews fue internado en el hospital de la Universidad de Iowa, donde los médicos mataron al gusano mediante dos disparos de láser.
El gusano murió con la aplicación del segundo disparo de láser, pero los médicos no podían retirarlo del ojo. El organismo de Matthews absorberá los restos del gusano, pero los profesionales creen provocará un daño permanente en su retina.
“Pudo haber sido anquilostoma que se me metió cuando estuve en México o ascáride de mapache que me agarré cazando pavo”, reveló el hombre al Telegraph Herald.
Fanático del canal de televisión Animal Planet, Matthews llamó a la estación de cable y les contó su historia. Un equipo de filmación viajó a Iowa y filmó lo ocurrido, que será emitido en el programa Shape Shifter.
Vía: La Carabina